
“ La Magia de la Danza Oriental hace que desaparezca el miedo que acompaña al pudor, aleja a la persona de su soledad y fortalece la confianza en el propio ser” (Shokry Mohamed)
La Danza Oriental es una de las danzas mas antiguas del mundo, combina elementos de diferentes países del Medio Oriente y Norte de África, aunque sus orígenes precisos son inciertos. En los países árabes esta danza se conoce como “Raks Sharki” que significa literalmente “Danza Oriental”.
El nombre “Danza del Vientre” se empieza a utilizar en el siglo XIX
por los europeos que viajaron a los países exóticos en busca de nuevas
culturas, costumbres y paisajes. Estos viajeros acuñaron este término
sorprendidos por los movimientos de vientre y cadera que no existían
en las Danza Europeas.
Hay que hacer la distinción entre el “Raks Sharki” (Danza Oriental)
y el “Raks Baladi” (Danza del Pueblo).
El “Raks Baladi” es una danza más elemental, prácticamente sin
desplazamientos y con movimientos de cadera predominantes.
Tiene que ver con la identidad y sus raíces culturales, es una danza
que surge en la intimidad del hogar en un contexto social
y comunitario.
El “Raks Sharki” es más refinado y rico. Incluye movimientos del Folklore Egipcio, la Danza Clásica y la Danza Contemporánea (con grandes desplazamientos, vueltas y movimientos para todas las partes del cuerpo, aunque los de cadera son también los más importantes).
Es una adaptación y refinamiento de estas danzas (populares) para llevarlas al espectáculo y grandes escenarios, por eso su estilización y especialización tan característica.
La Mágica Danza Oriental:
Si bien sus orígenes como danza ceremonial y sagrada en el
periodo faraónico (quizás antes) se ha ido extraviando con el
paso de los años.
Cada vez más personas en el mundo se cautivan con la espléndida
danza del vientre.
Hay todo un halo de misterio que la rodea. Y para muchos, en lo
más profundo de nuestro ser nos conecta con algo antiguo que
sentimos propio y muy familiar. Es parte de nuestra
memoria ancestral.
Y claro, todo ese misterio se desvela progresivamente cuando la
práctica se hace habitual.
Es que esta danza, por más que pasen los años no pierde su
enfoque trascendental.
Un día la descubres (o ella a ti) y comienzas a bailar, el movimiento viene acompañado de una enorme sensación de bienestar y alivio, sientes como tus músculos despiertan, reaccionan; se activan. Y algo, en algún lugar de ti, se libera.
La belleza de su música comienza a envolverte, y claro, ya no puedes parar. Relájate y disfrútalo.
El control del cuerpo (la precisión) comienza a transformarse en un símbolo de independencia y control en tu vida.
La sensación de bienestar te hace florecer, puedes estar a gusto con tu cuerpo. Y encontrar la armonía en todo tu ser.
Como te relacionas con la música, ese sutil vinculo refuerza tu seguridad personal y de pronto ya eres parte de algo más grande que tu individualidad.
Te permites salir de la burbuja, ahí afuera hay una comunidad cálida y acogedora que al igual que tu disfruta este descubrimiento. Entonces tu corazón se abre y la soledad se aleja, con cada pulso de la música los corazones se van acercando.
Y es ahí donde se haya la Magia de la Danza del Vientre, que te permite encontrarte y aceptarte, haciendo visible lo mejor y más bello de ti.
A través de ella (la Danza) puedes entregarte generosamente, compartir tu alegría y vitalidad.
Es ahí donde la magia aparece nuevamente…Por que las penas se pasan bailando…

La Danza Oriental


